jueves, 24 de octubre de 2013

reto 8º


Durante milenios,  las grutas que horadan las montañas del Cantábrico guardaron un tesoro de un valor incalculable. Ocultas a las miradas de los hombres, una gran cantidad de pinturas rupestres se conservaron gracias a la inaccesibilidad de las cuevas así como al poco interés que el pasado de nuestra especie generó en las anteriores generaciones.
La Ilustración, con su afán por conocer la verdad, propició que unos cuantos pioneros empezaran a mostrar interés por el origen de nuestra especie. Buscando argumentos que apoyaran sus propuestas políticas, decidieron adentrarse en las grutas, cuevas y cavernas que habían servido de refugió a los artistas del paleolítico. Recompensada su curiosidad con el hallazgo de centenares de instrumentos líticos, las excavaciones proliferaron a lo largo de los decenios siguientes, hasta que a principios del siglo XX, la fiebre paleontológica alcanzo máximos históricos. 
Nuestro país, tradicionalmente impermeable a las corrientes científicas que venían de Europa, no fue una excepción a este hecho. Investigadores de todos los rincones del viejo continente, atraídos por la belleza y calidad del arte rupestre cantábrico, acudieron en tropel a la llamada del pasado.
Pero el empeño y trabajo de los investigadores no fue suficiente para obtener conclusiones esclarecedoras. Por ello, algunos paleontólogos decidieron pedir ayuda a entidades y personajes del ámbito privado. Uno de estos mecenas financió las excavaciones en varias cuevas de la cornisa cantábrica. Quizá, si no se hubiera contado con su generosidad,  muchas de las pinturas de nuestras cuevas seguirían ocultas en la noche de los tiempos.
En el reto de hoy queremos saber:

1. Nombre del mecenas responsable de financiar las excavaciones.

Aviso: No os fiéis de las fotos. Conozco el google imágenes.

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